Cuales son los diferentes niveles de ignifugación en tableros



¿Qué son los tableros ignífugos?

Estos tableros son el resultado de una cuidadosa selección de materiales destinados a resistir el fuego y a detener su avance. Entre estos materiales se encuentran el silicato de calcio, el yeso, la fibra mineral y otros componentes especiales que trabajan en armonía para proteger la madera. Son como los guardianes inquebrantables del mundo de la construcción, creados para desafiar con valentía las altas temperaturas y frenar la expansión del fuego.

Sin embargo, no es necesario recurrir a productos químicos agresivos para proteger tu madera. El tablero fenólico, formado por capas de hojas de madera unidas con resina fenólica bajo una intensa presión. Este proceso, acompañado de altas temperaturas, transforma al tablero en un escudo impenetrable contra el calor y el fuego, capaz de detener el avance de las llamas en su tracks.

Estos criterios se representan mediante una serie de códigos estándar, como BS1D0, BS2D0 o CS2D0, entre otros. Cada combinación de letras y números describe un conjunto específico de características que detallan la resistencia al fuego de manera exhaustiva.

Hoy en día, es común toparse con la codificación BS, que sigue un sistema más riguroso y detallado para evaluar la capacidad ignífuga de los tableros. No obstante, aún persisten términos desfasados como M1 y M2, que a menudo se utilizan tanto en tableros como en puertas.

Es fundamental entender que estas denominaciones no ofrecen el mismo nivel de precisión que la nomenclatura actualizada de BS y pueden generar confusiones respecto a la verdadera capacidad de resistencia al fuego de los materiales.

Clasificación de los niveles de ignifugación para paredes y techos

La normativa europea EN 13501-1 establece tres categorías para evaluar la resistencia al fuego de los tejidos ignífugos: resistencia al fuego, producción de humo y producción de gotas/partículas incandescentes. En cuanto a la resistencia al fuego, se definen 7 indicadores que van desde la clase A1 (no combustible) hasta la clase F (altamente inflamable). La clase A1-A2 es la más deseable, indicando que el tejido es no combustible y no contribuye a la propagación del fuego.

Es crucial entender que el término "tejido ignífugo" no garantiza que el producto no se quemará bajo ninguna circunstancia, sino que tiene la capacidad de resistir el fuego, no propagar la llama y extinguirse automáticamente al eliminar la fuente de ignición.

Clases de resistencia al fuego:

Clase A1: No inflamable. No contribuye de manera significativa al fuego.
Clase A2: No inflamable. Contribución mínima al fuego.
Clase B: Inflamable. Contribución muy limitada al fuego.
Clase C: Inflamable. Contribución limitada al fuego.
Clase D: Inflamable. Contribución moderada al fuego.
Clase E: Inflamable. Contribución alta al fuego.
Clase F: Sin clasificación. Engloba productos que no cumplen con los requisitos anteriores o cuyas características no han sido evaluadas.

Indicadores adicionales de opacidad de humo

Cuando se trata de evaluar la densidad de los humos (Smoke):

s1: Implica una emisión baja de humos tanto en velocidad como en cantidad.
s2: Se refiere a una emisión media de humos en términos de velocidad y cantidad.
s3: Indica una emisión elevada de humos tanto en velocidad como en cantidad.

Además, se consideran indicadores adicionales sobre la caída de gotas/partículas:

d0: No hay presencia de gotas.
d1: Se produce la caída de gotas/partículas no inflamables.
d2: Se observa la caída de gotas/partículas inflamables.

Cuando se plantea la elección de la madera para distintos elementos en el hogar, es crucial tener en cuenta los diversos niveles de ignifugación para asegurar la seguridad y la protección contra incendios.